Los caracoles y las babosas son uno de los huéspedes más comunes en el huerto, estos simpáticos moluscos gasterópodos no entrañan ningún peligro para los cultivos siempre y cuando su población este controlada formando parte del ecosistema vivo del huerto.

No en vano a muchas personas les interesa mantener una población de caracoles controlada dentro de su huerto ya que les permite recolectarlos para preparar ricos y sabrosos platos culinarios que tienen como ingrediente principal a los caracoles.

El problema con los caracoles surge cuando estos se convierten en plaga, un excesivo número de caracoles puede llegar a mermar seriamente las cosechas, incluso pueden acabar por destrozar el cultivo entero.

Los caracoles aparecen en el huerto normalmente en épocas de lluvias intensas, les gusta salir a pasear después de una tormenta cuando el terreno esta húmedo a causa de la lluvia y las hortalizas preferidas por los caracoles como las lechugas, espinacas, acelgas… tienen las hojas fresquitas y se presentan como un manjar ante ellos.

Si en tu huerto te has decidido por la agricultura ecológica y por alguna causa el número de caracoles aumenta peligrosamente tienes que plantearte pasar a la acción si no quieres que los caracoles acaben con futuras cosechas.

Existen varios métodos para combatir las plagas de caracoles de una forma ecológica sin usar ningún tipo de agente químico, nosotros vamos a distinguir entre fórmulas que los eliminan completamente y entre fórmulas que los repelen o ahuyentan manteniendo así a salvo los cultivos.

Eliminación completa de los caracoles

Existen varias formas de acabar totalmente con los caracoles:

Repeler a los caracoles

Entre las formulas que existen para repeler o ahuyentar a los caracoles destacan las siguientes:

Estas son algunas de las fórmulas que existen para combatir a las plagas de caracoles en el huerto de una forma ecológica, como comentábamos anteriormente nosotros siempre te recomendamos que utilices fórmulas que no acaben con la vida de estos simpáticos animalitos ya que forman parte del ecosistema natural del huerto.

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